Comúnmente conocidos como “dedos en garra”, corresponden a deformidades en los dedos menores del pie.
Erróneamente conocido como espolón calcáneo, ya que por sí mismo el espolón no es la causa del dolor, esto es demostrado ya que del 50-75% de pacientes SANOS, es decir sin NINGÚN SÍNTOMA, pueden presentar un espolón en la radiografías, lo anterior pone en evidencia que el problema no es el espolón sino la fascia plantar.
La inestabilidad de tobillo es consecuencia de los esguinces de tobillo, los cuales son lesiones totales o parciales de los ligamentos que lo estabilizan, es decir que hacen que los huesos que conforman el tobillo permanezcan en su sitio.
Al juanete del dedo pequeño del pie se le conoce como juanete de sastre y es una protuberancia en la base del 5to dedo del pie.
Los famosos “juanetes”, son desviaciones en los huesos que conforman la articulación del primer dedo del pie, produciéndose una deformidad característica (en valgo). La deformidad del juanete no solo produce dolor y el evidente problema estético, sino que suele acompañarse de una serie de alteraciones como las metatarsalgias (dolor en la planta del pie) o dedos en garra.
El tratamiento depende de sus causas, sin embargo para casi todas las causas el tratamiento inicial consiste en no operarse. Consiste en el uso de analgésicos y antiinflamatorios, ejercicios de los músculos, principalmente flexores, y sobre todo con la prescripción de ortesis.
Como se ha mencionado antes, el pie debe adaptarse a los cambios durante la marcha, aquellos pies que no tienen esta capacidad deben ser tratados, naturalmente este reconocimiento debe ser realizado por un especialista, por un ortopedista (traumatólogo) y particularmente por un especialista en pie y tobillo.
El Pinzamiento de Tobillo se debe a lesiones traumáticas agudas o a lesiones por sobre uso, los pinzamientos anteriores se deben a prominencias óseas o tejido inflamatorio que pellizca el tobillo durante la extensión del mismo produciendo un dolor característico.